Sumario: | La tuberculosis (TB) es una de las 10 principales causas de muerte a nivel mundial y la
primera causa debido a un agente infeccioso, estimándose que el 23% de la población
tiene TB latente. En el 2017 se estimaron 10.0 millones de casos nuevos y 1.3 millones de
defunciones. La forma más común de esta enfermedad es la TB pulmonar y su principal
agente etiológico es la bacteria Mycobacterium tuberculosis (M. tuberculosis), la cual, en
el caso de TB pulmonar, es transmitida a través de la inhalación de microgotas en
aerosoles que contienen al bacilo viable. El tratamiento consta de la administración de los
fármacos de primera línea: isoniazida (INH), rifampicina (RIF), pirazinamida (PZA) y
etambutol (EMB), con una duración de seis meses. Sin embargo, la TB farmacorresistente
es una amenaza persistente, ya que en el 2017 se estimaron 558,000 casos nuevos de TB
resistente a rifampicina (TB-RR), de los cuales el 82% son TB multifarmacorresistente
(TB-MFR), por lo que se ha hecho necesario el uso de fármacos de segunda línea, no
obstante, el tratamiento es más tóxico, costoso y prolongado. La resistencia en
M. tuberculosis se ha asociado a mecanismos intrínsecos de la bacteria y a mutaciones en
genes específicos, sin embargo, esta condición no se cumple en todos los casos, sugiriendo
que existen otros mecanismos involucrados en este fenómeno. Debido a esto, en
investigaciones previas, nuestro equipo de trabajo comparó el perfil de expresión genética
entre un aislado clínico MFR (CIBIN:UMF:15:99) y una cepa sensible (H37Rv) de
M. tuberculosis, y se observó una sobreexpresión de los genes esxG y esxH en el aislado
clínico MFR; estos genes codifican para el complejo EsxG·EsxH, que funciona como
regulador de la secreción de proteínas y a su vez es secretado por el sistema ESX-3. Con
la finalidad de evaluar si la expresión diferencial de estos genes se encuentra vinculada
con la farmacorresistencia en M. tuberculosis, en el proyecto se evaluó el efecto de la
sobreexpresión del complejo EsxG·EsxH en la resistencia a fármacos de primera línea en
M. smegmatis, encontrando que dicha sobreexpresión no modifica las concentraciones
mínimas inhibitorias de los fármacos RIF, INH y EMB, por lo que será importante
dilucidar la interacción del complejo EsxG∙EsxH con otras proteínas codificadas tanto
fuera como dentro del locus esx-3 de la micobacteria, así como con proteínas de la célula
hospedadora.
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