Demandas físicas en jugadoras mexicanas de fútbol soccer profesional en competición

El fútbol es un deporte colectivo que es practicado por mujeres en diferentes niveles de competición como lo formativo, escolar, semiprofesional y profesional, de tal manera que ha logrado un impacto a nivel social, cultural y económico trayendo consecuencias positivas para la sociedad como la igual...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Arriaga Gallegos, Héctor Gerardo
Formato: Tesis
Lenguaje:Spanish / Castilian
Publicado: 2022
Materias:
Acceso en línea:http://eprints.uanl.mx/28377/7/28377.pdf.crdownload
Descripción
Sumario:El fútbol es un deporte colectivo que es practicado por mujeres en diferentes niveles de competición como lo formativo, escolar, semiprofesional y profesional, de tal manera que ha logrado un impacto a nivel social, cultural y económico trayendo consecuencias positivas para la sociedad como la igualdad de género (Garton, et al., 2021). El éxito en el fútbol femenil está determinado por múltiples factores como nutricionales, psicológicos, técnicos-tácticos y físicos (Costa et al., 2019; Crossley et al., 2020; Hafrún et al., 2019; Wynne et al., 2021). En lo que respecta al físico, diferentes estudios han documentado valores relativos a niveles de fuerza máxima en 1RM (Pedersen et al., 2021), el desarrollo de la velocidad de carrera (Haugen et al., 2014), programas de entrenamiento para mejorar la capacidad cardiorrespiratoria (Arazi et al., 2017), eficacia de los ejercicios pliométricos para mejorar la estabilidad de las extremidades inferiores (Porrati et al., 2021). Además de estas valoraciones que contribuyen al conocimiento sobre los perfiles físicos de las jugadoras también se ha publicado información con relación a las demandas físicas durante un partido (Modric et al., 2019; Oliva et al., 2020; Oliveira et al., 2019). Las demandas físicas han sido evaluadas mediante el uso de GPS (Bradley et al., 2010; Di Salvo et al., 2009; Rienzi et al., 2000; Stølen et al.,2005) en los que se destacan la distancia promedio que cubren las jugadoras por partido, el número de acciones a alta intensidad, la cantidad de aceleraciones y desaceleraciones, entre otras (Bozzini et al., 2020; Bradley & Vescovi, 2016; Griffin et al., 2020; Trewin et al., 2018).