Caracterización molecular de virus causantes de gastroenteritis en niños menores de cinco años de diferentes municipios del sur de Sonora.

La gastroenteritis viral afecta principalmente a niños menores de cinco años y se considera la segunda causa de muerte a nivel mundial. En el presente trabajo se detectaron y caracterizaron virus causantes de gastroenteritis en niños. El área de estudio incluyó la población infantil del Hospital Gen...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Quintero Ochoa, Guadalupe de Jesús
Formato: Tesis
Lenguaje:Spanish / Castilian
Publicado: 2017
Acceso en línea:http://eprints.uanl.mx/14131/1/1080241247.pdf
Descripción
Sumario:La gastroenteritis viral afecta principalmente a niños menores de cinco años y se considera la segunda causa de muerte a nivel mundial. En el presente trabajo se detectaron y caracterizaron virus causantes de gastroenteritis en niños. El área de estudio incluyó la población infantil del Hospital General de Navojoa y del Hospital del Niño y la Mujer de Cd. Obregón, Sonora. Se analizaron 179 muestras de heces de niños por RTPCR y análisis de secuencia, encontrándose 18 (10%) positivas para rotavirus, 8 (4.4%) para norovirus, 6 (3.3%) para astrovirus, 6 (3.3%) para sapovirus y 2 (1%) para adenovirus entéricos. De las 18 cepas positivas para rotavirus, la secuencia de los genes VP4 y VP7 indicó la presencia de 4 (22%) genotipo G12P[8], 3 (16.6%) genotipo G12P [no tipificado] y 2 (11%) genotipo GP[8] no-tipificado. De las 8 para norovirus, (25%) eran genotipo G1 y 6 (75%) G2, detectándose 2 (33%) genotipo GII.4 (variante Sydney 2012) y 1 (50%) genotipo GI.8. De las 6 cepas de astrovirus, 2 (33%) se caracterizaron como HAstV-2 y 1 (16%) como HastV-6. De las 6 de sapovirus, 1 (16.6%) era genotipo GI. I, y otra (16.6%) GII.I. De las 2 cepas de adenovirus, una (50%) correspondió al subgénero C tipo 6. Este es el primer reporte en México de cepas emergentes: G12 de rotavirus, HAstV-6 de astrovirus, GII.1 de sapovirus y GI.8 de norovirus, por lo que se recomienda continuar con el monitoreo epidemiológico y molecular de enterovirus en niños.